01/03/09

Para comenzar la semana

Les comparto a continuación un video de diez minutos que tres compañeras y yo hicimos el año pasado para la materia de Introducción a la Etnología. Si bien en ese entonces no habíamos analizado muy a fondo el sistema de intercambio de dones, intentamos abordarlo en relación con las cooperaciones que los migrantes mixtecos ofrecen a su lugar de origen. A ver qué les parece.


27/02/09

SOBRE EL IMAGINARIO, LO SIMBÓLICO, EL MODELO Y MÁS

VALE LA PENA, QUIZÁS, PARA ALIMENTAR UN POQUITA LA DISCUSIÓN EN EL BLOG (ALGO QUE DE PLANO NO SE ESTÁ DANDO PROBABLEMENTE PORQUE TOMA TIEMPO O PORQUE EL LENGUAJE DE SU MAESTRO ES DEMASIADO ENIGMÁTICO...) POSTEAR, CON EL PERMISO DE LOS INTERESADOS, ESTE INTERCAMBIO DE CORREOS QUE TUVIMOS ISABEL FUJI Y YO HACE UNOS DÍAS...


De: Carlo Bonfiglioli <carlobon@servidor.unam.mx>

Para: MARTINEZ Isabel <isabelmartinez5@hotmail.com>; FUJI Alejandro <alejandrofujigaki1@yahoo.com>; Salazar González Denisse

Enviado: miércoles, 18 de febrero, 2009 2:31:48

...De la introducción es importante y clara la distinción que Godelier (2007) hace, en la introducción (pp 37-43), entre el Imaginario y lo Simbólico, en la mira, obviamente, LS.

Como defendería yo al acusado.

LS no recurre a la categoría de Imaginario para hablar de la relación entre lo mental y lo extramental. Para él las expresiones tangibles y las representaciones conscientes, al igual que la exégesis (lo ideal en G), la esfera consciente del espíritu, es una suerte de materia prima, o en todo caso una materia segunda", que, desde luego, sí apela a factores causales, explica y otorga significaciones. Pero la disponibilidad de estas últimas siempre es mayor a la utilizada. Dicho de otro modo: las posibilidades siempre son en sobrenúmero con respecto de las elecciones (ver también Lorite-Mena y Koyré). El objeto del estructuralismo levistraussiano no es saber, en última instancia, porque esta relación entre el imaginario y lo simbólico (el objeto de Godelier) y no otra. Porque siempre hay una relación más que habría podido ser elegida y no lo fue. Lo que le interesa reconstruir entonces, a partir de la etnografia, es el conjunto de posibilidades para ponerlas a dialogar y reducirlas (por por progresiva abstracción analítica) a modelos o incluso modelo de modelos. La estructura (es decir, la relación entre las partes que conforman el sistema) está dada por el conjunto de sus transformaciones. Dentro de este esquema teórico-metodológico hay distinto grados de abstracción cada uno de los cuales sirve para explicar distintos órdenes de realidades.

Con respecto al intercambio planteó, en 1949, este modelo de modelos: un dualismo inicial entre intercambio (alianza) / no-intercambio (rivalidad, guerra) la segunda entendida como relación negada; ambas opuestas al campo exclusivamente teórico de la no-relación que corresponde en el mejor de los casos a la indiferencia (los mundos que no entran dentro de sus campos de relaciones sociales). Ahora bien por su parte el intercambio puede "dualizarse" en intercambio restringido y generalizado y el restringido en prescriptivo o preferencial y así siguiendo. Lo que sostuvo en 1952 en "Existen las organizaciones dualistas?" es que el dos es coextensivo del tres (la simetria dualista siempre implica, en potencia, una asimetría). Esta idea de la transformación del dos en tres, de la simetría en asimetría, tiene implicaciones mayores. En las Mitológicas mayores (de Lo crudo y lo cocido ...hasta el Hombre desnudo) y aun más en las menores (La vía de las máscaras, La alfarera celosa y la Historia de Lince), se convertirá, en transformaciones a cadenas (la tierra de los mitos es redonda; el humanismo infinito de Lévi-Strauss que menciona Maniglier, el Lévi-Strauss postestructuralista que menciona Viveiros). En otras palabras, y retomando algo que comenté en la sesión de presentación del programa: el sistema de transformaciones de Lévi-Strauss siempre admite una nueva posibilidad, un nuevo eje de transformaciones (planteado por nuevos descubrimientos etnográficos). Cuando la estructura parece cerrarse, se abre nuevamente, se cierra y se abre, pero ahora no sólo verticalmente como planteó en 1949, 1952, sino horizontalmente, a manera de rizoma (Deleuze, Viveiros...)

Como se refleja todo esto en la dicotomía Naturaleza / Cultura? De dicotomía rígida en 1949 (naturalismo / multiculturalismo) derivará en... (lo veremos)

De: Isabel Martínez <isabelmartinez5@hotmail.com>

Para: Carlo Bonfiglioli <carlobon@servidor.unam.mx>; Alejandro Fujigaki <alejandrofujigaki1@yahoo.com>; Denisse Ariadna Salazar Gonzalez <ariadnasagon@gmail.com>

Enviado: miércoles, 18 de febrero, 2009 18:26:27

Estoy lejos, pero poquito nomás...

El día de ayer, por la noche, antes de hacer la maleta, Fuji, Mauro y yo tuvimos una discusión que giraba en torno a este tema. Fuji leía L-S y yo a Londoño (alumno de Overing y critico de Viveiros), pero llegamos a ideas similares.

PRIMERO. Sobre lo material y lo inmaterial, sobre lo simbólico y lo "real".

Me pregunto ¿acaso no al considerar el punto de vista del nativo con una validez ontológica y epistemológica esta discusión se puede replantear como la distinción entre lo dado y lo construido (según el propio Viveiros)? En otras palabras las posibilidades simbólicas crean realidades concretas (y no por ello menos simbólicas, ni las primeras menos concretas, evidentemente), la pregunta (creo) más allá del modelo en sí mismo (ahora) es dar cuenta de las particularidades (sin olvidar el modelo) de esas elecciones y de esas posibilidades. Lo digo, porque una expresión de dichas elecciones y posibilidades es la socialidad humana, sus capacidades y potencias. Sigo con el segundo planteamiento, salto de este...

SEGUNDO. En la mesa de la cocina ayer se discutía si:

a) La sociedad es un concepto (por tanto un modelo), esto condiciona lo que observamos y cómo lo observamos.

b) Durkheim pensaba que la gente estaba junta por solidaridad (la violencia, el suicidio, eran anomalías), porque él tenía un proyecto político en la cabeza. Esa noción de socidad (solidaria, fundamentada en el don y la reciprocidad) la hereda Mauss y L-S, por su puesto de Rousseau (como Fuji decía).

c) Existen otras visiones de LO social y de la SOCIEDAD (Marx, Hobbes, Simmel, etc.) donde los hombres no están juntos por solidaridad sino por explotación, jerarquía, conlficto, etc.

La diferencia entre ambos modelos de la sociedad es que en el primero (durkheimniano) el conflicto es una anomalía, mientras que en el segundo es parte constitutiva de la sociedad. ¿En qué medida el conflicto, la guerra, es intercambio? (Tal y como los amazonistas propusieron en los 70's)

La sociabilidad amazónica no se reduce al sistema de alianzas (dice Viveiros), esta es la relación marcada y construida, la relación dada que lo domina todo es la afinidad, pero la verdadera afinidad está con los enemigos, con aquellos con los cuales no se establece alianza.

Así, volvemos al incio: qué es lo dado y qué es lo construido, lo marcado y lo no marcado. La asimetría, tanto como la simetría, hace que el mundo gire, la clave creo está en saber la particularidad de esa relación....

FIN

Inicio del mensaje reenviado:

De: Alejandro Fujigaki

Fecha: 18 de febrero de 2009 21:30:18 GMT-06:00

Para: Carlo Bonfiglioli , MARTINEZ Isabel , Salazar González Denisse

Hay muchas cosas emocionantes… Se me ocurren varias cosas:

Carlo, creo que en estos dos párrafos resumes de manera impresionante varias cosas. Me da la impresión que la discusión entre lo real-lo imaginario-lo simbólico es algo que preocupa demasiado a los antropólogos que le cuesta mucho trabajo pensar que lo real-lo imaginario-lo simbólico puede ser definido ontológica y epistemológicamente de manera muy distinta, a veces opuesta, a las definiciones de la ontología y epistemología racionalista cartesiana-ilustrada.

Es decir, cuando se define que los acontecimientos que pasan en un sueño son acontecimiento reales que suceden a la persona; se da por hecho que existen elementos de lo imaginario, de lo simbólico y de lo real. Dentro de la interpretación-defensa que haces del modelo levistraussiano se resuelve tal tricotomía (real-imaginario-simbólico) en tanto que los elementos del sistema analizado (ya sean reales, imaginarios o simbólicos, independientemente de cómo se definan) son materia prima o segunda del pensamiento salvaje y moderno.

Ahora, en tanto que la estructura es la relación de las partes que conforman el sistema, la estructura en realidad nunca se cierra, porque la estructura, en tanto relaciones está constituida como un sistema abierto, ya que socialmente no se pueden limitar el número de elementos del sistema (materiales, ideales, imaginarias, simbólicas, reales). Lo que en todo caso se modifica son los elementos extremos del modelo, dices tú, por los nuevos descubrimientos etnográficos, o también por la historia o por una lectura histórica del modelo. De esta manera, en tanto que la estructura son las relaciones, el 3 es más que una coextención del 2, sino es constitutivo de este último; en tanto relaciones, la asimetría es la constitutiva de la simetría por las posibilidades diacrónicas y sincrónicas del sistema de transformaciones y de las transformaciones de los elementos del sistema (la máscara de Batman [que mencionas en un artículo] por los cuernos del diablo).

En este sentido, todo la gama de dicotomías derivadas de las discusiones estructuralistas pueden concebirse como puntos opuestos del modelo de sus respectivos ámbitos culturales y niveles lógicos: lo dado-lo construido, la naturaleza-cultura, real-imaginario-simbólico, modelo-ejemplo, sociedad-individuo, coerción-agencia, estructura-coyuntura, continuidad-transformación, normalidad-anomalía, solidaridad-conflicto, regla-innovación.

Por ejemplo, independientemente que la socialidad sea por solidaridad o por beligerancia, por naturaleza o por cultura, por lo dado o lo construido, por la coerción o por la agencia, etc, el punto es que la socialidad funciona (¿o sólo así la concebimos?) de manera sistémica: los conflictos (la violencia), ya anomalía, ya orgánica a lo social, es sistémica a la resolución de los conflictos (la paz). La naturaleza y la cultura, independientemente de cómo se definan, son sistémicamente constitutivas mutuamente.

Ahora, sobre el dualismo que Carlo menciona. Me da la impresión que no es un dualismo entre alianza/guerra, sino dos elementos coexistentes del don en sí mismo y de los sistemas de prestaciones totales. El dualismos en el modelo de Mauss es entre una Rivalidad exasperada (destrucción de riquezas, don antagónico, la guerra) y Rivalidad moderada (intercambio de regalos navideños, don solidario, alianza) (Carlo, creo que en la clase se manejó más el antagonismo entre el don no utilitario y el don utilitario, habrá que aclararlo, no? ). Según LS, para los nambikwara, hay una vinculación, a manera de continuidad, “entre las relaciones hostiles y el abastecimiento de prestaciones recíprocas: los intercambios son guerras resueltas en forma pacífica; las guerras son el resultado de transacciones desafortunadas”. La transición continua, según CL-S es: entre la guerra-los intercambios-los intermatrimonios. Así mismo, de la hostilidad a la alianza, de la angustia a la confianza, del miedo a la amistad (último párrafo del Cap 5, de las Estructuras).

Sobre la discusión de la noción de sociedad:

La continuidad podrá rastrarse en Rousseau (contrato social), Durkheim socialidad por solidaridad; Mauss: los intercambios van más allá de intercambios interesados; LS: el intercambio sirve para pasar de la hostilidad a la alianza, de la angustia a la confianza, del miedo a la amistad. El origen de las explicaciones teóricas sobre el contrato social (Hobbes, Locke, Rousseau) tienen su punto de partida en el estado natural de los humanos. Dependiendo del tipo de noción de naturaleza humana es que da origen al tipo de razones por las que los humanos rompen su estado natural para pasar a un estado social.

(Dando un vistazo en Wikipedia:)

Es decir, para Hobbes la naturaleza humana, en tanto instinto de conservación lleva a la guerra. El contrato social debe establecerse para alcanzar la paz. La razón se impone sobre la ley natural.

Para Locke la naturaleza humana es cristiana. El contrato social se funda para arreglar las disputas que se originen por la naturaleza humana de dos individuos que no logren ponerse de acuerdo.

Para Rousseau el estado de naturaleza es de el buen salvaje, es decir, un ser sin maldad, “en el que predominan dos sentimientos básicos: el amor de sí, es decir el instinto de autoprotección, y la piedad (repugnancia por el sufrimiento ajeno)”. “Descarta que el vínculo se halle en la fuerza o la sumisión, sino que por el contrario, los hombres voluntariamente renuncian a un estado de natural inocencia para someterse a las reglas de la sociedad, a cambio de beneficios mayores inherentes al intercambio social. Este consentimiento voluntario se materializa a través de un contrato, "el contrato social" en este caso.”

Seguimos...

Chido:-)

Inicio del mensaje reenviado:

De: Isabel Martínez

Fecha: 19 de febrero de 2009 12:25:00 GMT-06:00

Para: Alejandro Fujigaki , Carlo Bonfiglioli , Denisse Ariadna Salazar Gonzalez

Acerca de lo de Fuji:

Sueños:

El sueño es real ontológicamente hablando, pero es distinta a esta realidad de la vigilia (no perder de vista esto tampoco), la diferencia no está en el estado o en el espacio físico o temporal en sí mismo, sino en quién vive la experiencia: el alma, que luego la traduce al cuerpo bajo la forma de memoria. Es decir, la dicotomía real-imaginario también existe en los otros, como en nosotros, pero como dices, es distinta.

Ahora, sobre el dualismo que Carlo menciona. Me da la impresión que no es un dualismo entre alianza/guerra, sino dos elementos coexistentes del don en sí mismo y de los sistemas de prestaciones totales. El dualismos en el modelo de Mauss es entre una Rivalidad exasperada (destrucción de riquezas, don antagónico, la guerra) y Rivalidad moderada (intercambio de regalos navideños, don solidario, alianza) (Carlo, creo que en la clase se manejó más el antagonismo entre el don no utilitario y el don utilitario, habrá que aclararlo, no? ). Según LS, para los nambikwara, hay una vinculación, a manera de continuidad, “entre las relaciones hostiles y el abastecimiento de prestaciones recíprocas: los intercambios son guerras resueltas en forma pacífica; las guerras son el resultado de transacciones desafortunadas”. La transición continua, según Claudio es: entre la guerra-los intercambios-los intermatrimonios. Así mismo, de la hostilidad a la alianza, de la angustia a la confianza, del miedo a la amistad (último párrafo del Cap 5, de las Estructuras).

Sobre Naturaleza y Cultura:

Fuja escribió:

El origen de las explicaciones teóricas sobre el contrato social (Hobbes, Locke, Rousseau) tienen su punto de partida en el estado natural de los humanos. Dependiendo del tipo de noción de naturaleza humana es que da origen al tipo de razones por las que los humanos rompen su estado natural para pasar a un estado social.

Creo que Fuji da en el corazón de la discusión sobre socialidad: la naturaleza humana, es decir, lo que es dado en cada cultura o marco teórico a lo humano, aquello que no se construye culturalmente. A partir de esto veremos o explicaremos por qué se vive en colectividad y por qué el intercambio es fundamental.

:-)))

23/02/09

Estaba re.pensando, y siguiendo a Godelier, ¿el don en la sociedad occidental se caracteriza por el cálculo y la presencia del guardar -que a veces puede resultar en acumular-, junto con las tres obligaciones del interambio? Si es afirmativo, ¿podría seguir llamándose don?
Empezando a utilizar estos espacios...nuevos para mí. Obvio, me llegó el correo de Carlo anexando sus propuestas. Las leí pues de conjunto, por lo que escribo sólo este correo desarrollando reflexiones de cada una de aquellas.
1. Por un lado, Mauss pareciera querer responder el impulso de la sociabilidad (o sociedad, no sé si para Mauss sea lo mismo...), está pues preguntándose por un primer momento. El simbolismo se señala entonces como el fundamento de lo social en nuestra especie, como una condición a priori.
Lévi-Strauss se aleja un poco del apriorismo de la condición, al complementar la lectura de Mauss con la presencia de los porcentajes de orden de la naturaleza, propiedad mental e irrupción de la arbitrariedad. Siendo además este último factor la cultura misma -por aquello de las regularidades- y, por tanto, una expresión simbólica.

2. Si lo anterior tiene sentido con lo que hemos visto en la clase y la discusión en este blog, quisiera preguntar: ¿la pregunta profunda de Lévi-Strauss es entonces por el surgimiento y/o mantenimiento del orden social? Si fuera una pregunta por el surgimiento y mantenimiento, ¿qué se entiende por surgimiento, momento histórico? ¿La pregunta de Lévi-Strauss es por qué y cómo socializamos universalmente?
Eso sí, la respuesta está en el intercambio. ¿Serán entonces las formas del intercambio la pregunta de la antropología?

3. ¿La sugerencia de Lévi-Strauss cuando dice en el capítulo sobre el principio de reciprocidad: “Los bienes no son solo valores económicos sino también instrumentos de realidades de otro orden: poder, simpatía, condiciones, emociones (…) el sabio juego de intercambios consiste en un complicado conjunto de maniobras, conscientes o inconscientes, que miran a ganar garantías o a prevenir riesgos, en el doble terreno de las alianzas y de las rivalidades”, está dando pistas metodológicas para abordar los acontecimientos culturales con el telón de fondo de la totalidad?
Si esto es así, el simbolismo, en tanto herramienta analítica de la sociedad, no tendría porque caer en mecanicismos ni estatismos.
Ahora bien, la consideración del tiempo, de la incertidumbre, en las prácticas, finalmente en lo-que-sucede, ¿puede ser abordado por el estructuralismo de manera explícita y metodológica?


21/02/09

LÓGICA DEL DON EN NUESTRO ENTORNO SOCIAL

Hay muchos ejemplos acerca de cómo opera el principio de reciprocidad en nuestras sociedades, a pesar de las diferencias. Ana decía, la vez pasada, que el sentirse obligado es algo volátil (se mencionó el ejemplo de las obligaciones festivas). Y Abel también decía que es imposible predecir (la incertidumbre de Bourdieu?). En otras palabras, mucho depende, sino de las estrategias de las coyunturas. Fuji, por el contrario, afirmó que la lógica del don (la triple obligación) es estructurante de la conducta social o por lo menos de toda esa esfera de acción que implica un surplus afectivo, personalizado. Podríamos plantear la pregunta al revés: qué tal sería de las relaciones sociales si no operara la lógica del don, el principio de reciprocidad, si sólo operara la lógica contraria (la del negocio a secas, por ejemplo). Habría sociedad?

Otra cuestión planteada es la de las dicotomías (la planteó Juan Pablo pero Abel también tiene cosas por decir)

Otra cuestión a tratar es lo de lo imaginario y lo simbólico, planteada por Mauricio (Godelier :-)

Laura, que la otra vez puso en la mesa la cuestión de la violencia y de la agresividad (cosa sobre la cual podemos regresar), comentó que la frontera entre naturaleza y cultura puede plantearse en términos filosóficos apelando a la idea de finitud.  "...la conciencia de lo finito, de la muerte. Nosotros los humanos somos concientes de ello". Idea interesante,  pero una vez más esto remite al big-bang de lo simbólico... En fin, ya es suficiente por hoy. Buenas noche

ALIANZAS, RIVALIDADES Y ESTRATEGIAS

El modelo planteado  por Lévi-Strauss para entender la naturaleza simbólica de lo social ha derivado en varias críticas y les mandé varios escritos que no hemos abordado bien la sesión pasada: Bourdieu, Godelier y Caillé. Creo que el común denominador de sus críticas --y cada una de ellas aporta cosas, a la discusión-- es que este modelo tan abstracto, que elimina el sujeto del escenario (un sujeto artífice de su propia historia y de sus propias especificidades), no nos permite entender las dinámicas sociales y culturales. Es cierto, para  entender estas cosas hay que quedarse más acá de este modelo. Pese a esto, el modelo no impide hacer aditamientos y me parece que las críticas apuntan más a lo que no dice que a lo que dice y, la verdad, a veces no entiendo las críticas (culpa, desde luego, de mi formación "estructuralista feliz"). 

Por ejemplo, dice Bourdieu que:

... la mayor parte de las acciones humanas no obedecen a determinaciones mecanicistas sino a una lógica de la práctica es decir,una mediación entre condiciones objetivas de la acción y esquemas perceptivos que el individuo adquiere por medio de su inserción y experiencie en un tejido de relaciones sociales (una historia incorporada).

El don implica incertidumbre, improvisación lo que constituye todo su encanto y eficacia social. Reintroducir la incertidumbre es reintroducir el tiempo, con su ritmo, su irreversibilidad sustituyendo la mecánica del modelo por la dialéctica de las estrategias pero sin recaer en la antropología imaginaria de las teorías del “actor racional (169)

Suena bien, no tengo nada en contra; sin embargo, en el capítulo sobre el principio de reciprocidad LS dice: “Los bienes no son solo valores económicos sino también instrumentos de realidades de otro orden: poder, simpatía, condiciones, emociones (…) el sabio juego de intercambios consiste en un complicado conjunto de maniobras, conscientes o inconscientes, que miran a ganar garantías o a prevenir riesgos, en el doble terreno de las alianzas y de las rivalidades”. Acaso ¿no implica la palabra juego "estrategias frente a la incertidumbre"?

Me parece, para regresar a la cuestión del modelo y de su grado de abstracción, que todo depende del tipo de realidades que queremos explicar. Si nos ubicamos a nivel de lo humano es evidente que el modelo será extremadamente abstracto y fluctuará entre la simetría y la asimetría de las relaciones, la alianza y las rivalidades. Si nos ubicamos a nivel de coyunturas habrá que ajustar el modelo a las coyunturas y considerar todos los factores históricos, sociales e incluso afectivos. No sé si me explico y si me explico ¿qué piensan? Hay más cosas que decir a ustedes la palabra.



EL PUNTO DE PARTIDA

Ya lo resolví...


Tratemos de hacer el punto sobre algunas cosas abordadas hasta ahora.

Al arrancar con Mauss (MM) y Lévi-Strauss (LS) y sucesivamente Godelier (MG) nos preguntamos cuál es el fundamento de lo social en nuestra especie. Desmarcándose de una teoría fundamentada en las necesidades materiales y fisiológicas  --un fundamento utilitario-- ambos autores proponen, a partir de una valoración diferente de ciertos datos etnográficos y también de otro tipo, algo que no apela a una causa o una necesidad sino a una condición a priori: el simbolismo, para Mauss, la expresión de la sociedad misma; para Lévi-Strauss dispositivo mental que se inscribe a la vez en el orden de la naturaleza ¾en tanto propiedad cerebral común a todos los seres humanos¾ y la cultura ¾en tanto permite lo que Leori-Gourhan (1964-65) definió como "la irrupción de la arbitrariedad en la banalidad zoológica de los sentidos". A partir de este momento, se asume que si no fuera por esta última característica, la arbitrariedad (las reglas convencionales), la diferencia entre seres humanos y otras especies sociales sólo podría plantearse en términos de grado o forma, LS, en cambio, plantea una diferencia cualitativa, el simbolismo.

El mérito de MM según LS es haber abierto las puertas a una teoría simbólica de lo social, que sólo no formuló --lo que formuló, según él, es una teoría social del simbolismo-- porque al momento de explicar el enigma de la devolución del don recurrió a la teoría indígena de la animación-personificación del objeto donado. Es decir, en lugar de cerrar el modelo con una explicación sociológica de intercambio --explicación que a su vez apelaría a la naturaleza simbólica de lo social--  MM abdicó en favor de un modelo fenomenológico que privilegia la concatenación de las partes para explicar el todo. Es lo que les comentaba en otro correo "el hau y el mana  pertenecen al primer orden explicativo: el de la reflexión sujetiva de una totalidad vivida pero no conscientizada --la exégesis; "significado"...-- cuando la explicación última está, según LS, en la totalidad de la relación, el intercambio, cuyo carácter sintético es unir sincrónicamente a las partes. La forma simbólica (el "significante flotante") antecede su contenido ideológico (variable). Está disponible en toda sociedad; sin embargo, cada sociedad lo significa a su manera. En este sentido, "Los símbolos --dice en la p. 28-- son más reales de lo que significan".

Es este modelo una proyección del antropólogo? No, dice LS. La prohibición del incesto es un dato empírico [recuerden que durante su estancia en Nueva York LS se peinó todos los datos etnográfico a su disposición] que demostraría, de múltiples maneras, en los cinco continentes, que para ser sociedad hay que renunciar a los deseos inmediatos, individuales, y poner a circular --compartir-- el objeto del deseo, sin renunciar a la propia individualidad dentro del grupo. La prohibición del incesto es la regla, arbitraria (porque no-necesaria) y universal a la vez, por medio de la cual un hecho tan básico y tan biológico --tan "natural"-- como la reproducción de la vida humana es sometida a una lógica simbólica de lo social. De ahí también la afirmación de que el simbolismo de la relación es "más real" de los términos que se ocupa de unir, de las tres obligaciones que la conforman... La sociabilidad no es una propiedad exclusiva de la especie humana; su carácter simbólico sí lo es...

Saludos! En primer lugar trataría de definir algunas normas mínimas para que esto funcione y para que no estemos colgados todo el tiempo en el blog. Comencemos con dos, luego iremos añadiendo otras, de ser el caso.

1. Puesto que hay diferentes niveles en el curso, tratemos de ser claros y concisos (esta es la ventaja de la escritura con respecto de la oralidad) al formular preguntas, dudas, reflexiones.

2. Cuando nos referimos a lo dicho por alguien, sea éste un integrante del curso o un autor leido en el curso o en otra parte, especifiquémolo con claridad